Periodismo Virtual
jueves, 17 de mayo de 2012
Comentario Reportaje
Este Reportaje me llamo mucho la atención por su forma de redacción y su buena ortografía, es un reportaje con un tema especifico y muy ameno para el lector. las fotos son claras y llamativas.
Reportaje
“DE
LA CONDENA SOCIAL A LA ACEPTACIÓN POR IGUAL”
El
primer grupo de liberación Gay en Colombia nació en los años 40. Estaba
compuesto completamente por hombres y era llamado los “Felipitos”. Era
clandestino y limitado a un pequeño grupo de individuos de las clases altas.
Debido
a lo anterior hay textos en las Sagradas Escrituras que condenan las prácticas homosexuales, así se ve en Romanos 1
versículos del 8 al 32, donde se hace referencia a esta condición, tachándola
como un acto anormal que debe ser castigado:
“Por eso Dios los abandonó a sus
pasiones secretas; se entregaron a la impureza y deshonraron sus propios
cuerpos. Ahora sus mujeres cambian las relaciones sexuales normales por relaciones
contra la naturaleza. Los hombres dejan la relación natural con la mujer y se apasionan los unos por los otros;
practican torpezas varones con varones, y así reciben en su propia persona el
castigo merecido por su aberración. Y no solamente lo hacen sino que aprueban a
los que actúan de igual modo”.
Dios ama a todos por igual, pero la
iglesia juzga como pecadores a todo
aquel que sienta deseo por los de su mismo sexo; con estas palabras se expresa Lucas
David Fernández, un joven de 21 años que a partir de este fragmento bíblico
cuenta como ha sido su experiencia de vida frente a su condición sexual.
Lucas, un estudiante de Comunicación
Audiovisual de la Universidad de Antioquia, quien hace 5 años y medio abandono
su pueblo ubicado en Nariño por la comodidad tanto de él y de su familia, quienes
aseguraban que se había ido a estudiar a Medellín para tener mejores
posibilidades; pero desconocían la verdadera razón por la cual deicidio dejar
su hogar, que era para evitar que fueran victimas de críticas o rechazos por su
preferencia sexual y el estilo de vida que decidió vivir.
Prejuicios absurdos conllevan a la sociedad a esbozar ideas sin
fundamento, hacer críticas e irrespetar los gustos personales de los
demás que no alcanzan a extrapolar la información que diariamente
reciben. Existe un conflicto interno entre[1]
Lo demandado por la ciudadanía y el sentido común propio que tantea cuan
maduros o abiertos nos encontramos frente a las preferencias sexuales de cada
persona.
Menciona Lucas, “Fue muy difícil
empezar una nueva vida en una ciudad, donde no conocía a nadie y no poseía una
estabilidad económica y más sabiendo que tenía que dejar a mi familia y amigos
por la estigmatización de la gente del pueblo”.
Para el este proceso de adaptación en una nueva ciudad estuvo lleno de
obstáculos y al no conocer a nadie ni
tener un apoyo, sus necesidades básicas eran más complejas de conseguir, por
tal motivo decidió explorar el mundo de la internet, para conocer personas que
le facilitaran de alguna manera los medios para residir en Medellín; de este
modo comenzó a tener interacción con personas afines a sus gustos y
necesidades.
La internet, permite que las personas sean más abiertas, se desinhiban
de sus miedos y actúen con libertad. De este modo Lucas comenzó a conseguir
amigos, con los que poco a poco se fue conociendo y construyendo amistades.
Dice el personaje, “por la internet conocí a un chico, me vi con el y
nos comenzamos a conocer, conocí mas
personas y las cosas cambiaron ya no era tímido, tenia muchos amigos y
salía con ellos para todas partes. Me volví muy descontrolado, rumba aquí y rumba
allá; solo quería estar en ese ambiente de fiesta, quería divertirme y pasar bueno, no quería
hacer nada que no fuera eso, mejor dicho mi vida estaba totalmente alocada”.
¿CUÁL FUE LA LLAVE PARA SU LIBERTAD?
La web fue para él la llave que
abrió una puerta hacia su libertad, en pocas palabras hacia un mundo nuevo, diferente al que él estaba
acostumbrado en su pueblo, Por esta razón al ser tímido y no conocer casi el
mundo gay en Medellín, quería empezar a
probar cosas nuevas y abrirse a
este, su mundo.
No vivía con sus padres, él podía ser él mismo sin ninguna clase de
restricción o crítica. En el mundo
homosexual es muy común que las personas nuevas en este ambiente comiencen un
estilo de vida muy desordenado, sin límites, sin barreras porque todo lo
quieren conocer y probar, la diferencia
es que hay personas volátiles que son conscientes
y deciden tomar el control de su vida,
como hay otras que simplemente viven en
el placer diario sin pensar los
perjuicios futuros que llegasen a afectarlos.
“yo decidí vivir esa vida caótica, con licor, droga, sexo con muchos
hombres, pero gracias a Dios no fui como muchos, tome conciencia y pensé si eso era lo que quería para mi, y
llegue a la conclusión que por ser gay no tengo porque dejar de ser responsable
o dejar de cumplir con mis cosas, ser gay no es igual a descontrol, eso depende
de cada persona como elige llevar y vivir su vida”, así lo expresa Lucas.
Cuando
la ley juzga como delito la relación homosexual entre adultos libres y
conscientes de sus actos, está claro que no pretende proteger la moral pública
ni la seguridad de sus individuos, sino que tiene una finalidad moralizadora.
¿QUE DICE LA LEY?
La Corte Constitucional en sentencia
T-539 de 1994, M. P. Vladimiro Naranjo Mesa, sostuvo:
“En nuestro ordenamiento constitucional,
la orientación homosexual, incluso si asumimos que ésta es escogida libremente
y no determinada biológicamente, no puede constituir un criterio para que la
ley restrinja el acceso de la persona a un determinado bien o le imponga una carga,
por cuanto las autoridades estarían no sólo afectando su libre desarrollo de la personalidad (CP art. 16) sino que
además desconocerían el pluralismo que la Corte ordena proteger (CP art. 7º).
Se ha demostrado que las personas
homosexuales gozan de una doble protección constitucional. Así, si la
orientación sexual se encuentra biológicamente determinada, como lo sostienen
algunas investigaciones, entonces la marginación de los homosexuales es
discriminatoria y violatoria de la igualdad, pues equivale a una segregación
por razón del sexo (CP art, 13).”
“Lucas considera que Medellín es una de
las ciudades con mayor aceptación en Colombia,
el lugar más agradable para que un gay viva, hay personas más abiertas a cambios y a
respetar que no todos tenemos los mismos gustos sexuales”.
Pero en su pueblo el tema
de la homosexualidad ha sido muy polémico debido al
impacto emocional que ejerce en las familias campesinas, por ser tan
tradicionalistas y estar siempre pendientes del medio social en el cual se
desenvuelve
Él dice, “la gente piensa que ser gay es ser
peluquero, pero no es así; hay gays abogados, profesores, administradores
e.t.c; los gays también podemos tener una profesión porque tenemos las mismas
capacidades que puede tener una persona que no lo sea, lo complicado es que
esta sociedad nos dé la oportunidad de desarrollarnos y mostrar nuestras
capacidades”.
Existe
un conflicto interno entre lo demandado por la ciudadanía y el sentido común
propio que tantea que tan maduros o abiertos se encuentra la sociedad, frente a las preferencias sexuales de cada
persona; pero en todas las sociedades sin excepción la homosexualidad se ha ido
superando largamente, la mera satisfacción de tensiones corporales,
convirtiéndose en un núcleo básico para la organización social y la reproducción
de regulaciones morales; respetando los gustos y la intimidad de las
preferencias de las demás personas.
Gabriel actualmente en
Medellín, vive una vida tranquila y organizada; él decidió en caminarse,
estudiar y trabajar, para demostrar que ser gay no significa enfermedad ni
trastorno, ni nada de los calificativos que la sociedad con tantos prejuicios
da. Prejuicios que conllevan a esbozar ideas sin fundamento, hacer críticas e
irrespetar los gustos personales de los demás que no alcanzan a
extrapolar la información que diariamente reciben.
miércoles, 16 de mayo de 2012
Como hacer un Reportaje
Hacer un reportaje
Para hacer un reportaje debes seguir el siguiente esquema:
- Introducción al tema que se va a tratar, con un lenguaje atractivo, interesante y directo.
- Desarrollo amplio del contenido. El reportero da su opinión personal sobre el hecho, analizándolo, describiendo los detalles y ofreciendo una visión de carácter general.
Al redactar el reportaje hay que tener en cuenta una serie de técnicas:
- Conocer claramente los hechos o el tema que sirve de base al reportaje.
- Buscar información para dominar el tema totalmente.
- Hacer un esquema de las principales ideas que se quieren exponer.
- Escribir los primeros párrafos intentando llamar la atención del lector, de forma que el relato resulte atractivo y sugerente.
- Desarrollar el tema con absoluta objetividad, procurando que no decaiga el tono del relato.
- Adoptar las cualidades propias del buen reportaje: exactitud, precisión, sencillez, naturalidad, ritmo, color, corrección y propiedad.
Película " Bowiling for Columbine"
"Bowling for Columbine" es un documental dedicado a la controvertida cuestión de la posesión de armas legales en los Estados Unidos.
La película comienza mostrando la facilidad con la que se puede adquirir un arma de fuego en dicho país: con tan solo abrir una cuenta bancaria. Partiendo de esa idea, Moore analizará los trágicos sucesos de school shooting, como los ocurridos en el instituto de Columbine en 1999, en el que dos jóvenes antes de suicidarse acabaron con la vida de catorce alumnos y un profesor, u otro hecho similar que ocurrió en Flint, al sur de Denver, donde un niño de seis años le robó el arma a su tío y asesinó a una niña de su clase.
El documental lanza diversas hipótesis que intentan esclarecer por qué en EE.UU. existe esa fiebre por las armas de fuego. Se exponen cifras y datos, contrastados con los índices de posesión de armas y criminalidad en otros países como Canadá.
Moore entrevista a personas en tela de juicio como Marilyn Manson, que fue acusado de inducir a la violencia a los chicos de Columbine a través de las letras de sus canciones; o Charlton Heston, presidente de la Asociación Nacional del Rifle; sin dejarse en el camino a autoridades, gentes de la calle, profesores, intelectuales, fanáticos y todo tipo de fauna sociológica.
jueves, 15 de marzo de 2012
Comentario semanal de Noticias
Las mujeres salen del closet
Existen miles de mujeres que han acogido el lesbianismo como opción de vida, pero que buscan salir del closet porque todavía les cuesta mucho trabajo asumirlo ante una sociedad “Las lesbianas somos invisibles en este país”, dice Fabiola Espitia una homosexual coordinadora de un grupo de mujeres de orientación sexual diferente a la heterosexual, llamado Triángulo Negro.
Y esa invisibilidad a la que se refiere Fabiola tiene mucho que ver con que pocas personas perciben de verdad a una pareja lesbiana cuando ve a dos mujeres juntas. Para muchos simplemente son dos amigas íntimas, dos compañeras de apartamento, dosprimas, y casi nunca se imaginan que sean pareja.
Para casi nadie el hecho de que dos mujeres se cojan de la mano, se abracen, se saluden de beso, compartan apartamento o vayan a cine juntas, representa que haya una relación romántica y erótica implícita. Pero las homosexuales quieren demostrar que no tiene nada de malo amar a otra mujer. Que no les gusta ser invisibles, aunque haya algunas que prefieran ocultar su orientación sexual por las discriminaciones o los traumas familiares que les acarrea. Y que quieren expresarse su amor en público sin ser agredidas.
“La gente quiere que uno sea lesbiana, pero en privado, que nos guardemos en nuestros apartamentos para demostrarnos los afectos. Nosotras somos seres humanos sociales y sexuados que necesitamos permear todos los ambientes de la sociedad”, dice Fabiola. Aunque se ha logrado avanzar en lo que implica el respeto hacia la diferencia y hacia las orientaciones sexuales distintas a la heterosexual, aún falta mucho camino por recorrer.
Hace apenas 25 años que la Asociación Siquiátrica Americana dejó de considerar al homosexualismo como un trastorno siquiátrico y en su Manual de Diagnóstico y Tratamiento publica: “el lesbianismo es una forma de conducta sexual, así como otras, que no son en sí mismas trastornos siquiátricos, no se incluyen en la nomenclatura de trastornos mentales”.
Según la sicóloga Ana María Salazar “ha habido apertura en razón de la orientación sexual de los individuos pero aún falta. Y aunque muchos piensan que el mal llamado ‘problema’ de estas mujeres representa un gran conflicto para ellas, normalmente es un conflicto mayor para las familias o amigos que no logran asumir que esa mujer que han visto crecero que creen conocer bien, sea homosexual.
“Normalmente llegan a mi consultorio —dice Ana María Salazar—mujeres en busca de orientación de cómo contarle a su familia y casi nunca por confusiones sobre su orientación sexual”. Este hecho sirve de termómetro de lo que ha significado el lesbianismo en la sociedad. Si hasta hace sólo medio cuarto de siglo, ser lesbiana era considerado una patología, obviamente, relaciones heterosexuales y después se interesan por las mujeres.
Yo he visto casos de algunas que a los 50 años, casadas y con hijos, empiezan a inclinarse por las relaciones lésbicas”, dice la sicóloga. “La sexualidad —dice Fabiola— es un proceso síquico, uno la construye. La heterosexualidad nos encasilla porque es la única posibilidad de relación que tienen hombres y mujeres y no permite otras posibilidades. Que se hace o se nace, la verdad es que no se ha descubierto. En este momento, lo más importante es lo que se está sintiendo y hay que tener las posibilidad de decidir”.
Existen miles de mujeres que han acogido el lesbianismo como opción de vida, pero que buscan salir del closet porque todavía les cuesta mucho trabajo asumirlo ante una sociedad “Las lesbianas somos invisibles en este país”, dice Fabiola Espitia una homosexual coordinadora de un grupo de mujeres de orientación sexual diferente a la heterosexual, llamado Triángulo Negro.
Y esa invisibilidad a la que se refiere Fabiola tiene mucho que ver con que pocas personas perciben de verdad a una pareja lesbiana cuando ve a dos mujeres juntas. Para muchos simplemente son dos amigas íntimas, dos compañeras de apartamento, dosprimas, y casi nunca se imaginan que sean pareja.
Para casi nadie el hecho de que dos mujeres se cojan de la mano, se abracen, se saluden de beso, compartan apartamento o vayan a cine juntas, representa que haya una relación romántica y erótica implícita. Pero las homosexuales quieren demostrar que no tiene nada de malo amar a otra mujer. Que no les gusta ser invisibles, aunque haya algunas que prefieran ocultar su orientación sexual por las discriminaciones o los traumas familiares que les acarrea. Y que quieren expresarse su amor en público sin ser agredidas.
“La gente quiere que uno sea lesbiana, pero en privado, que nos guardemos en nuestros apartamentos para demostrarnos los afectos. Nosotras somos seres humanos sociales y sexuados que necesitamos permear todos los ambientes de la sociedad”, dice Fabiola. Aunque se ha logrado avanzar en lo que implica el respeto hacia la diferencia y hacia las orientaciones sexuales distintas a la heterosexual, aún falta mucho camino por recorrer.
Hace apenas 25 años que la Asociación Siquiátrica Americana dejó de considerar al homosexualismo como un trastorno siquiátrico y en su Manual de Diagnóstico y Tratamiento publica: “el lesbianismo es una forma de conducta sexual, así como otras, que no son en sí mismas trastornos siquiátricos, no se incluyen en la nomenclatura de trastornos mentales”.
Según la sicóloga Ana María Salazar “ha habido apertura en razón de la orientación sexual de los individuos pero aún falta. Y aunque muchos piensan que el mal llamado ‘problema’ de estas mujeres representa un gran conflicto para ellas, normalmente es un conflicto mayor para las familias o amigos que no logran asumir que esa mujer que han visto crecero que creen conocer bien, sea homosexual.
“Normalmente llegan a mi consultorio —dice Ana María Salazar—mujeres en busca de orientación de cómo contarle a su familia y casi nunca por confusiones sobre su orientación sexual”. Este hecho sirve de termómetro de lo que ha significado el lesbianismo en la sociedad. Si hasta hace sólo medio cuarto de siglo, ser lesbiana era considerado una patología, obviamente, relaciones heterosexuales y después se interesan por las mujeres.
Yo he visto casos de algunas que a los 50 años, casadas y con hijos, empiezan a inclinarse por las relaciones lésbicas”, dice la sicóloga. “La sexualidad —dice Fabiola— es un proceso síquico, uno la construye. La heterosexualidad nos encasilla porque es la única posibilidad de relación que tienen hombres y mujeres y no permite otras posibilidades. Que se hace o se nace, la verdad es que no se ha descubierto. En este momento, lo más importante es lo que se está sintiendo y hay que tener las posibilidad de decidir”.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)